Calaveritas

Esta foto la tome en Pátzcuaro, en un corredor de localitos comerciales que me encanta, aunque no era aun día de muertos (obviamente) , por la cercanía de la fecha ya había por todos lados decoración y venta de objetos alusivos al tema, lo que mas me retequeteencantó fue una exposición-venta de catrinas que eran una verdadera chulada, lástima que (muy lógicamente) no dejaban tomar fotografías y mi presupuesto no hubiera alcanzado para una, porque su costo era alto pero lo valían, eso si.

Comparto esta foto sin muchos comentarios, sabiendo que el ambiente en estos días, viendo el tema de la muerte por todos lados, no el ataque de hallowen ni de las películas de terror, sino el puro tema del fin de nuestras vidas, nos hará probablemente reflexionar acerca de los que estamos y de los que ya se nos adelantaron, del panteón y de la tumba, de la cripta y las cenizas, de lo que nos dejaron y lo que les dimos, también de las omisiones, y nos haga pensar una vez mas acerca de la vida, de nuestra vida, de la trillada pero muy cierta frase de aprovecharla al máximo y buscar lo que para cada uno de nosotros sea la felicidad, de no detenernos y desgastarnos en pequeñeces, ni en odios ni en rencores, para cuando nos llegue la hora, poder irnos en paz, a donde quiera que sea que nos vayamos.

Lo que me faltaba...

Pues si, lo que me faltaba.

Resulta que me fui unos días de vacaciones, un relax muy bien acompañada de mi amorcito en el bello Pátzcuaro y sus alrededores.

Esa es la parte buena, la mala es que desde unos días antes de partir sentí una ligera molestia en la zona que ahora se que se llama lumbar de la columna y un poco torpe mi pierna derecha, yo lo justifiqué con cansancio normal acumulado y a mis ocho horas diarias de sedentarismo en la oficina, por consiguiente lo ignoré.

Ya en el camino hacia las vacaciones la molestia aumentó, el coche se me hacía chico para estirar la pierna que la tuve dormida casi todo el camino, los ratos que no estaba entumida, dolía. Pensé que por el viaje aunque no era muy lógico porque son poco menos de tres horas que comparadas con las que estoy sentada en el trabajo, realmente no son nada.

En fin para no estar con molestia, llegando busqué una farmacia y compre una pastillita para el dolor y listo, como nueva.

Así pasaron los días de aquí para allá, entre el coche visitando alrededores, caminando, comprando chacharitas , paradas continuas para tomar fotos con tripié y toda la cosa y todo eso que se hace cuando uno va a pueblear.

Pero la ultima noche fue horrible, el dolor no me dejó dormir, se volvió insoportable, un dolor clavado en medio de la pompa que recorría por detrás de toda la pierna hasta el tobillo y terminaba con unas punzadas como ardor en la pantorrilla, no sabia si gritar o llorar, ya ni las pastillas me lo quitaron, en la mañana bajó un poco, pude dormir un rato, obviamente me levante tardísimo, ya solo fué el desayuno y regresamos.

En el viaje de regreso el dolor volvió, no se si por el movimiento pero desde ese instante no se quitó mas, es el dolor mas fuerte que he sentido en mi vida, no se como describirlo pero nunca nunca había llorado por un dolor, y con este si. Deducción: ir al médico.

Debo decir que soy de lo mas negada a ir al doctor, de hecho me cuesta trabajo porque como la única doctora que me llegaba atender que era amiga de la familia se fue de la ciudad asi que desde entonces no tengo un doctor, digamos de cabecera por lo que tuve que pedir referencias de alguno. Alguien de la oficina me recomendó una internista así que hice mi cita.

El diagnostico fue inflamación del nervio ciático. Completito, desde la zona lumbar hasta la pantorrilla pasando por detrás de la rodilla que es la parte mas inflamada, la revisión de la doctora fue un martirio, no se como hacen para tocarte de manera que te duela hasta lo que no sabias que te dolía, casi grito.

En fin, en consecuencia tengo un laaaaaaargo mes de tratamiento que consta de 15 inyecciones de esas que te duele hasta el huesito cuando te la ponen, y un montón de pastillas para el dolor para la inflamación y unas que para restaurar el nervio, eso hasta que ceda la inflamación y poder hacer otros estudios para averiguar las causas, además absoluto reposo lo cual es relativo porque tengo que ir a trabajar, no me dieron incapacidad y ahí pues si con la pena con todo y la prohibición tengo que manejar porque no pienso pagar tantos taxis, y pues por consecuencia nada de alcohol ni de salidas ni de nada, todo lo demás tiene que ser re-po-so. Ah y que tengo que usar calcetas de abuelita, largas, para mantener calientita mi pierna y el frió no haga que me duela mas.

Eso si, que ni me haga ilusiones porque el dolor no desaparecerá de inmediato, será gradual hasta como en una semana que ceda por completo.

En el trabajo ya tuve que hacer adaptaciones, puse un banquito para subir mi pierna cuando ya no soporte mas y mis vueltas a la planta alta serán ahora mínimas, eso si mis compañeros preocupados por mi ya me han dado chorro mil remedios alternativos que van desde la acupuntura, un medico cubano, hasta el untarme una pomada para caballos que me juraron que es bueniiiiiiiiiisima, jejeje, eso me hizo gracia pero bueno se agradecen las intenciones. Yo creo que mejor voy a conseguir un bote grande grande de basura, y me tiro yo solita.

Conclusión: Ya chafié.

Si alguien tiene algún otro remedio alternativo o le ha pasado algo similar, o el bote de basura, se aceptan sugerencias y comentarios.

Solo yo...

Voy a escribir poco pero es necesario, he descubierto que aunque no soy de escribir diario este blog y los de muchos otros que leo casi a diario se han convertido en parte de mi vida, no se que tan importante aún, pero son parte ya.

Como decia esto será breve porque es domingo, 11:44 de la noche, estoy muerta, estoy sola y estoy asimilándolo.

Como escribí en algún otro post, yo vivía con mis hermanos o mas bien ellos vivían conmigo, si había planes de que se mudaran por ahí de diciembre o enero, ese era el plan, pero por circunstancias del momento este fin de semana se mudaron, y aunque fue lo que deseaba, realmente, no por ellos porque al final de cuentas son mi familia, si por mi espacio, por mi, por salud mental.

Aún así tengo un sentimiento extraño, no se si es por el modo que todo sucedió, no se si por lo vacía que se siente la casa, no se si por el vacío que quedo donde estaba el comedor, pero es extraño, hasta lloré un poco cuando entre a la casa luego que se fueron con sus últimas cosas, si yo se que los seguiré viendo estamos en la misma ciudad donde las distancias aún son relativamente cortas pero en este tiempo me había acostumbrado a su presencia. Si ya se que me contradigo a cada línea...Así es como me siento.

Ahora soy solo yo, (y mi perro) estamos solitos, nos volveremos a adaptar y estaremos bien.

Me voy a dormir.

Quien fuera perro...

Tengo un perro, un pequeño animalito que en este momento esta dormido al lado de mi en el sillón. Su nombre me lo reservo, es un jack russell terrier, una raza que creo hasta hace poco no era muy común en México.

Me lo regalaron, vi uno parecido en una revista y me encanto, así que cuando me dijeron que en un criadero cercano tenían una parejita de hermanos, hembra y macho y que uno sería mio, me emocioné aunque al momento siguiente dudé. Como la mayoría de personas que trabajamos paso la mayor parte del día fuera de casa, y como adoro los animales me pareció que podía ser una crueldad tenerlo en esas condiciones, solo por eso, el espacio no era problema, mi casa tiene afortunadamente el patio suficiente para una animalito de ese tamaño.

Dude por un rato y al final me decidí ir a verlos, eran dos pequeños cachorritos, un encanto, simplemente hermosos, la hembra toda blanca con solo un lunar obscuro alrededor de su ojo, el macho también blanco con una mancha en el lomo como la de snoopy y su cara y orejas también con lunar en tonos obscuros. No sabia cual tomar, la hembra era tal como la vi en la revista, pero el macho no me soltaba. Media hora de indecisión y me quedé con él.

Salí del criadero con el perro aferrado a mi, era pequeñito, hacia frió así que antes de llevarlo al veterinario pasé a mi casa y con una calceta mía, aún recuerdo gris con rayas amarillas y dibujos de snoopy (si así de ridículas eran, jijij), le hice tres cortes y ese fue su suéter, así de pequeñito era. Lo lleve al veterinario, unos cuantos tarjetazos y regresé a casa con un perro, una casa, una cama, comida, cartilla de vacunación, una correa y un collar de colores.

Fue muy enfermizo, no se porque, una vez casi muere, pero lograron salvarlo, y eso creo hizo encariñarme mas con el, y de pasada me condenó a comprar comida especialísima porque quedo un poco delicado, además de cuidar que no le den demasiadas cosas que no sean su comida, como la semana de caldo de pollo que le dio mi madre en últimos días, o los pedazos de pastel o de hot cakes que le dan mis hermanos y que le encantan.

Ahora tiene 4 años y medio, cumplimos años el mismo mes, en marzo, el tendrá 5 y yo, 31 (ups), y nos hemos acoplado el uno al otro, él a esperarme pacientemente a que regrese y lo lleve a caminar y yo a apresurarme a llegar a hacerlo antes de continuar con lo que tenga en el día. No logro hacerlo a diario pero si la mayoría, conciente de que los días que me sea imposible, tendré como resultado sus reclamos, porque si, me reclama.

Yo se que hay quien creerá que exagero, o peor aún, a quien no le gusten los perros, pero yo los adoro, y al mio por supuesto que más, el ha sido mi compañero en las buenas en las malas y en las peores en estos casi 5 años, me ha visto llorar, me ha visto reir, y aunque mi hermano diga que estoy loca por hacerlo, es mi mejor confidente, y platico con el como si me entendiera y en realidad a veces creo que si me entiende.

En días como hoy lo envidio, porque mientras yo me convierto en ama de casa porque los domingos suelen ser días de limpieza, el se dedica a verme de lejos, y dormitar a ratos mientras yo limpio. Justo este momento, esta profundamente dormido y solo levanta la oreja cuando hago un ruido mas fuerte de lo normal y luego duerme de nuevo.

Quien fuera perro...

La visita de mis padres....Que ya se fueron.

Han pasado ya algunos días, muchos para mi gusto pero mis padres se han ido (por fin), ups me siento algo culpable aún al escribirlo así, pero es la verdad.
Afortunadamente no llegamos a más que simples desacuerdos cotidianos, al acostumbrado “sentimiento” que le da a mi mamá cuando dice que no le hago caso o al mal genio de mi papá cuando le contradigo. Nada nuevo.

En fin, el punto es que ahora que se fueron, no puedo decir precisamente que todo terminó y en santa paz, porque aun no puedo, en realidad el motivo por el que andaban por acá no esta resuelto y de hecho no sabemos bien en que vaya a parar, pero bueno esa es otra historia, por lo pronto en lo que respecta a la visita este es el resumen.

Paso el reporte. El saldo fué, despensa vacía, reubicación de objetos en la casa hecha por mi madre (no encuentro ni el bendito cuchillo), observaciones acerca del mantenimiento general de la casa hechas por mi papá, una larga laaaaaaaaaarga lista de consejos, recomendaciones y advertencias acerca de los peligros de andar en la calle a determinadas horas de y de vivir sola, ah y un perro que ya no quiere las croquetas porque mi mamá le daba su caldito de pollo al angelito -"tan flaquito que está"-.(inche perro, come mejor que yo).

En fin, quisiera escribir más, pero no lo hay. Por el momento es así de simple, regresaremos supongo a la “normalidad” de llamarnos por teléfono, de visitas breves y de desacuerdos a distancia hasta nuevo aviso o nueva visita.

Ah por cierto, como resultado adicional a todo esto, se supone que mis hermanos se mudan en un para de semanas. No canto victoria porque en 15 días todo puede suceder, como que cambien de opiníón por ejemplo. Espero que no porque ya estoy saboreando mi regreso a la soledad.